Hace unos días
el diario HOY (14/09/2021) se hacía eco de la protesta de un ciudadano que,
harto de los ruidos nocturnos que impiden el descanso de los vecinos del Casco
Antiguo, realizaba pintadas alusivas a estos fenómenos en los suelos del barrio.
En otras
ocasiones, los medios de comunicación se han hecho eco de las quejas de vecinos
ante los camiones de la basura o de la limpieza en altas horas de la noche, de
las interminables voces en las puertas de los bares de copas de ociosos
bebiendo y haciendo otros menesteres, y otras situaciones igualmente molestas.
Pero, también, han aparecido las quejas de los vecinos por el mal estado de las
baldosas o de las arquetas lo que provoca un continuo “bum bam” al pasar los
coches.
Resulta muy
curioso que se refieran a esta persona con el apodo de ´vándalo’ o de ´bandido`
por lo que hace, y que nunca se hayan utilizado estos apelativos para aquellos
que, en muchas ocasiones de manera consciente, producen estos ruidos que
impiden el descanso a numerosos vecinos en Badajoz.
No estoy de
acuerdo con los grafitis realizados en este caso. Como tampoco lo estoy con
aquellos otros que nos ensucian nuestras fachadas y el mobiliario urbano en el
barrio. Evidentemente, me parecen indecentes aquellos que causan ruidos
nocturnos fácilmente evitables o destrozos en las calles y mobiliario y los que
los toleran o fomentan. Usualmente, la administración mira para otro lado,
haciendo caso omiso de las numerosas quejas y denuncias de los vecinos.
Por ello,
entiendo la acción de este vecino que ha visto su acción como último recurso
para llamar la atención ante un problema que parece no importarle a nadie,
salvo a los que lo padecemos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario