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martes, 12 de enero de 2016

De bolos matemáticos por Zaragoza y Logroño



Mis compañeros del la Universidad de Zaragoza y de la Universidad de Logroño han tenido la amabilidad de invitarme a participar en dos seminarios sobre educación matemática. En el primer caso para impartir una conferencia en el Seminario de Didáctica de las Matemáticas, organizado por el Instituto Universitario de Investigación de Matemáticas y Aplicaciones y por el Departamento de Matemáticas de la Universidad de Zaragoza En el segundo, para participar en un Curso de actualización en Matemáticas, organizado por el Departamento de Matemáticas y Computación de la Universidad de La Rioja.
https://riemann.unizar.es/seminario-didactica/
Y he correspondido a la invitación preparando dos intervenciones sobre algo de lo que se supone que debo saber: La resolución de problemas de matemáticas. Así que me voy de bolos matemáticos.
Hablaré sobre la diferencia entre dos expresiones que aparentemente debieran tener el mismo significado: “Resolver problemas de matemáticas” y “Resolución de problemas de matemáticas”. Y lo haremos, como no debe ser de otra manera, partir de problemas concretos de matemáticas. La primera la considero una actividad concreta, mientras que la segunda debiera ser un contexto de aprendizaje para las matemáticas.
Y reflexionaremos sobre la evaluación de matemáticas que será diferente según optemos por un significado o por otro. Para ello pasaré un pequeño test que nos permita reflexionar sobre qué valoramos en la evaluación en matemáticas y que aspectos omitimos en la evaluación, qué cosas decimos que son importantes valorar del aprendizaje de los estudiantes y qué aspectos valoramos en las actividades de aula y en los exámenes cuando le proponemos problemas a los estudiantes.
Algo que considero muy interesante.
 


Y ya para terminar os dejo un problema de matemáticas, pero cuidado con darse por contento cuando penséis en la solución trivial.


Dos personas comparten la comida. El primero aporta dos panes y el segundo otros tres. Antes de comenzar, llega un tercero que no aporta ningún pan pero señala que, en compensación, les dará cinco monedas a los comensales anteriores para que se las repartan entre ellos. 
¿Cómo deberían distribuirse las cinco monedas los dos primeros?


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