Hace poco tiempo se ha vuelto a hablar de la necesidad de dividir Badajoz en distritos. Os dejo dos artículos que me publicaron el diario HOY sobre ello, hace algunos años.
Badajoz, Ciudad heterogénea. (HOY, 13/01/2002).
"Decir que Badajoz ha crecido mucho en los últimos años es reconocer
una evidencia. En ocasiones recuerdo con mis amigos que, cuando éramos niños,
casi todo era campo más allá de la avenida de Santa Marina. Y más
recientemente, a principio de los 80, que a partir del Polígono de La Paz, casi
todo era campo. Y, con el nuevo PGOU el campo que vemos en el entorno a La
Granadilla o la avda. de Elvas lo veremos sembrado de edificios.
En la última década del siglo XX, se ha producido una
expansión por múltiples zonas. Y esta seguirá ya que tenemos una media de
población joven superior a la media de España y Extremadura. Este crecimiento
ha hecho de Badajoz una ciudad heterogénea y con distritos diferenciados que
deben ser considerados desde todos los ámbitos posibles, sociales, sanitarios,
educativos, culturales, económicos, etc.
En Marzo pasado el periódico HOY publico un interesante
trabajo de Antonio Cid sobre la distribución de la población en nuestra ciudad.
En base a estos o otros datos podríamos señalar que existen varias zonas en
Badajoz claramente diferenciadas y cuya población es superior a la mayoría de
las poblaciones extremeñas. Así, San Roque y La Picuriña (16.000 hab.) serían
mayor que Zafra o Montijo y la margen derecha del Guardiana o la nueva zona
entorno a la carretera de Olivenza tendrían más habitantes que Almendralejo o
Don Benito. Y, cada vez son más las personas que habitan casi exclusivamente en
una de estas zonas con escasa relación con otros barrios.
Ello significa que Badajoz ha dejado de tener una única zona de referencia y que debemos empezar a pensar que coexisten diversos distritos que deben ser considerados como tales y dotarlos de todos los servicios que la sociedad actual necesita (administrativos, biblioteca, complejos culturales, deportivos y de ocio, etc.). De esta manera reconduciríamos el desarrollo de Badajoz que, actualmente, es muy desigual y falto de planificación.
Por otra parte, no todas las zonas de expansión tienen los
mismos problemas. De esta manera podemos encontrar una zona como la margen
derecha del Guardiana, entorno a los 30.000 habitantes, que necesita, entre
otras cosas, de un complejo deportivo completo similar al de la Granadilla, un
centro cultural y biblioteca adecuada o centros de salud apropiados o servicios
administrativos que permitan a la población realizar fácilmente los papeleos
municipales. Se imaginan que Almendralejo no tuviera ninguno de estos
servicios.
Pero también podemos encontrar otras zonas como la de
Suerte de Saavedra (6.000 personas) o la de Las Cuestas y Los Colorines (5.000)
donde además de la dotación de los servicios de carácter general, de los que
carece, son necesarias y urgentes actuaciones de carácter social y económico.
Badajoz debe abordar y solucionar los problemas que surgen en sus barrios o
distritos, abordándolos de una manera global y con un proyecto específico para
el mismo. Y con urgencia aquellos que tiene más necesidades.
La solución a estos problemas, así como el desarrollo de la
ciudad debe hacerse desde la planificación y vertebración de Badajoz como una
urbe heterogénea y multipolar, garantizando a cada distrito disfrutar de los
servicios que definen la sociedad del bienestar. Y desde esta perspectiva el
Casco Antiguo quedaría como referencia básica e histórica para todos,
recogiendo, además de los servicios básicos que les correspondieran, aquellos
que fueran referencia única para la ciudad que se ubicarían, de ser posible, en
edificios emblemáticos.
Hacerlo significaría apostar para que Badajoz tenga un desarrollo ordenado y que llegue a ser la gran ciudad del sudoeste peninsular que todos deseamos."
Propuestas integrales para la ciudad. (HOY. 10/02/2003).
Quiero recordar esta
obviedad porque en ocasiones anteriores el debate electoral se ha centrado en
proponer una serie de actuaciones concretas, necesarias y convenientes, que
parecían más un intento de complacer deseos espontáneos de los ciudadanos con
fines electoralistas que propuestas surgidas de un análisis riguroso de las
necesidades y posibilidades de cada una de las ciudades. Extremadura está en un
momento muy importante de desarrollo que está provocando el crecimiento de sus
grandes ciudades. Ello origina numerosos problemas que debieran resolverse en
un marco claro y de futuro, lo más consensuado posible entre las diferentes
fuerzas políticas y sociales para garantizar mejor su cumplimiento.
Por ello, creo
necesario debatir y realizar propuestas integrales que reflejen una visión
global y concreta del modelo ideal de ciudad que se desea. Una propuesta que se
muestre, a la vez, idealista y realista y que marque un horizonte pensado y
deseado por y para la mayoría. Consecuentemente, cualquier gestión posterior o
cualquier nueva propuesta debiera ser ordenada y priorizada dentro de ese gran
proyecto general.
Para mostrar esta
necesidad voy a centrarme en Badajoz que, además de ser la ciudad que mejor
conozco, es una de las ciudades extremeñas donde el crecimiento ha sido mayor
en los últimos años, y donde claramente ha faltado ese modelo deseado para
nuestro futuro. Pero señalo que muchas de las reflexiones posteriores valen
igualmente para otras grandes ciudades de nuestra región.
Esta ausencia de plan
integral fue ya puesta de manifiesto en el II Simposio sobre la economía de la
ciudad de Badajoz, que fue organizado, en el 2002, por la Sociedad Económica
Amigos del País. Entre las conclusiones, y después de señalar que Badajoz es
una ciudad dinámica con múltiples posibilidades por su situación geográfica y
por ser la ciudad con mayor número de habitantes en un entorno de 200 km, se
denunciaba específicamente que “la
ciudad carece de un Plan Estratégico Global que haya propiciado consenso sobre
el futuro o haga converger recursos públicos o privados”. No es la primera vez
que esta idea aparece en debates sobre los problemas de nuestra ciudad. Por
ello reitero que sería necesario aprovechar este año electoral para profundizar
en los problemas y expectativas de Badajoz al objeto de buscar líneas de actuación
sobre el futuro y no sólo para aumentar el número de inauguraciones. Y por ello
animo a la Económica, y a diferentes asociaciones en el ámbito que les
corresponda, a retomar este debate que sin duda será útil para las ciudades.
La necesidad de una
propuesta integral la sentimos en nuestro Casco Antiguo. De esta manera estamos
viendo que en el Casco Antiguo se desarrollan múltiples actuaciones
urbanísticas, económicas o culturales motivadas por el deseo de los pacenses de
recuperar nuestro pasado, pero sin la existencia de un plan diretriz que ordene
todas estas actuaciones planteando objetivos concretos y coordinando todos los
proyectos, independientemente de quien los proponga. Así, ligado a estas
propuestas revitalizadoras, que aplaudo, debe aparecer una política definida
que permita el desarrollo económico, social y cultural en esta zona, teniendo
en cuenta que, si queremos recuperarla, deberemos generar las condiciones
reales que permitan a los ciudadanos acceder fácilmente a ella con el convencimiento
de que encontrarán espacios que permitan satisfacer sus necesidades de ocio,
comerciales o profesionales.
También notamos la
ausencia de proyecto en el terreno de las comunicaciones. Pasamos el año
discutiendo sobre el desdoblamiento de la Avda de Elvas o de la carretera de
Valverde (ambos necesarios, urgentes y ya en camino) sin haberse planteado la
urgencia de una nueva vertebración de los barrios para facilitar el tránsito
por la ciudad y más en aquellos lugares por donde se produce mayor desplazamiento.
De esta manera, Badajoz tendría ya que haber resuelto, además de lo anterior,
la entrada/salida de San Roque en diferentes direcciones, las comunicaciones de
San Fermando-Polígono del Nevero-Universidad o haber establecido una nueva
conexión de las Vaguadas con la carretera de Olivenza, entre otros.
De igual manera,
pasamos el tiempo debatiendo y proponiendo acciones tímidas sobre el paso del
AVE por Badajoz sin haber realizado una propuesta acerca de la necesidad de
mejorar las comunicaiones de nuestra ciudad que permita que cualquier ciudadano
que viva en un radío no superior a 100 km, de Badajoz pueda desplazarse a
nuestra ciudad en menos de una hora. Y sea utilizando transporte público o
privado.
Podríamos seguir
hablando de las diferentes zonas específicas que existen en Badajoz algunas de
las cuales tienen más de 25.000 habitantes, lo que significa que coexisten
diversos distritos que deben ser considerados como tales y dotarlos de todos
los servicios que la sociedad actual necesita (administrativos, biblioteca,
complejos culturales, deportivos y de ocio, etc.). Ello, implicaría
planificación y vertebración de Badajoz como una urbe heterogénea y multipolar,
garantizando a cada distrito disfrutar de los servicios que definen la sociedad
del bienestar.
Podríamos seguir hablando de la política industrial, del papel de la Universidad, de las relaciones con Portugal, . . . Son muchos los aspectos que debieran estar contemplados para garantizar que el desarrollo de Badajoz sea armónico y con perspectivas de mantenerse en el tiempo. Y muchos de ellos requieren de unas relaciones institucionales estables, caracterizadas por el diálogo y la cooperación.
Tenerlos en cuenta a todos, conjuntamente y por sectores, en un Plan Integral que reuniera un amplio consenso significaría apostar para que Badajoz tenga un desarrollo sostenible y para que llegue a ser la gran ciudad del sudoeste peninsular que todos deseamos.
Si fuéramos capaces de hacerlo en cada una de las grandes ciudades de nuestra región seguro que consolidaríamos este gran momento que vivimos en Extremadura."
La convocatoria de
las elecciones municipales y autonómicas para el próximo 25 de Mayo sugiere la
oportunidad de realizar un debate sereno y profundo sobre los aspectos
esenciales que impulse el crecimiento de nuestras grandes ciudades y consoliden
las bases para su desarrollo futuro.
Quiero recordar esta
obviedad porque en ocasiones anteriores el debate electoral se ha centrado en
proponer una serie de actuaciones concretas, necesarias y convenientes, que
parecían más un intento de complacer deseos espontáneos de los ciudadanos con
fines electoralistas que propuestas surgidas de un análisis riguroso de las
necesidades y posibilidades de cada una de las ciudades. Extremadura está en un
momento muy importante de desarrollo que está provocando el crecimiento de sus
grandes ciudades. Ello origina numerosos problemas que debieran resolverse en
un marco claro y de futuro, lo más consensuado posible entre las diferentes
fuerzas políticas y sociales para garantizar mejor su cumplimiento.
Por ello, creo
necesario debatir y realizar propuestas integrales que reflejen una visión
global y concreta del modelo ideal de ciudad que se desea. Una propuesta que se
muestre, a la vez, idealista y realista y que marque un horizonte pensado y
deseado por y para la mayoría. Consecuentemente, cualquier gestión posterior o
cualquier nueva propuesta debiera ser ordenada y priorizada dentro de ese gran
proyecto general.
Para mostrar esta
necesidad voy a centrarme en Badajoz que, además de ser la ciudad que mejor
conozco, es una de las ciudades extremeñas donde el crecimiento ha sido mayor
en los últimos años, y donde claramente ha faltado ese modelo deseado para
nuestro futuro. Pero señalo que muchas de las reflexiones posteriores valen
igualmente para otras grandes ciudades de nuestra región.
Esta ausencia de plan
integral fue ya puesta de manifiesto en el II Simposio sobre la economía de la
ciudad de Badajoz, que fue organizado, en el 2002, por la Sociedad Económica
Amigos del País. Entre las conclusiones, y después de señalar que Badajoz es
una ciudad dinámica con múltiples posibilidades por su situación geográfica y
por ser la ciudad con mayor número de habitantes en un entorno de 200 km, se
denunciaba específicamente que “la
ciudad carece de un Plan Estratégico Global que haya propiciado consenso sobre
el futuro o haga converger recursos públicos o privados”. No es la primera vez
que esta idea aparece en debates sobre los problemas de nuestra ciudad. Por
ello reitero que sería necesario aprovechar este año electoral para profundizar
en los problemas y expectativas de Badajoz al objeto de buscar líneas de actuación
sobre el futuro y no sólo para aumentar el número de inauguraciones. Y por ello
animo a la Económica, y a diferentes asociaciones en el ámbito que les
corresponda, a retomar este debate que sin duda será útil para las ciudades.
La necesidad de una
propuesta integral la sentimos en nuestro Casco Antiguo. De esta manera estamos
viendo que en el Casco Antiguo se desarrollan múltiples actuaciones
urbanísticas, económicas o culturales motivadas por el deseo de los pacenses de
recuperar nuestro pasado, pero sin la existencia de un plan diretriz que ordene
todas estas actuaciones planteando objetivos concretos y coordinando todos los
proyectos, independientemente de quien los proponga. Así, ligado a estas
propuestas revitalizadoras, que aplaudo, debe aparecer una política definida
que permita el desarrollo económico, social y cultural en esta zona, teniendo
en cuenta que, si queremos recuperarla, deberemos generar las condiciones
reales que permitan a los ciudadanos acceder fácilmente a ella con el convencimiento
de que encontrarán espacios que permitan satisfacer sus necesidades de ocio,
comerciales o profesionales.
También notamos la
ausencia de proyecto en el terreno de las comunicaciones. Pasamos el año
discutiendo sobre el desdoblamiento de la Avda de Elvas o de la carretera de
Valverde (ambos necesarios, urgentes y ya en camino) sin haberse planteado la
urgencia de una nueva vertebración de los barrios para facilitar el tránsito
por la ciudad y más en aquellos lugares por donde se produce mayor desplazamiento.
De esta manera, Badajoz tendría ya que haber resuelto, además de lo anterior,
la entrada/salida de San Roque en diferentes direcciones, las comunicaciones de
San Fermando-Polígono del Nevero-Universidad o haber establecido una nueva
conexión de las Vaguadas con la carretera de Olivenza, entre otros.
De igual manera,
pasamos el tiempo debatiendo y proponiendo acciones tímidas sobre el paso del
AVE por Badajoz sin haber realizado una propuesta acerca de la necesidad de
mejorar las comunicaiones de nuestra ciudad que permita que cualquier ciudadano
que viva en un radío no superior a 100 km, de Badajoz pueda desplazarse a
nuestra ciudad en menos de una hora. Y sea utilizando transporte público o
privado.
Podríamos seguir
hablando de las diferentes zonas específicas que existen en Badajoz algunas de
las cuales tienen más de 25.000 habitantes, lo que significa que coexisten
diversos distritos que deben ser considerados como tales y dotarlos de todos
los servicios que la sociedad actual necesita (administrativos, biblioteca,
complejos culturales, deportivos y de ocio, etc.). Ello, implicaría
planificación y vertebración de Badajoz como una urbe heterogénea y multipolar,
garantizando a cada distrito disfrutar de los servicios que definen la sociedad
del bienestar.
Podríamos seguir hablando de la
política industrial, del papel de la Universidad, de las relaciones con
Portugal, . . . Son muchos los aspectos que debieran estar contemplados para
garantizar que el desarrollo de Badajoz sea armónico y con perspectivas de
mantenerse en el tiempo. Y muchos de ellos requieren de unas relaciones
institucionales estables, caracterizadas por el diálogo y la cooperación.
Tenerlos en cuenta a
todos, conjuntamente y por sectores, en un Plan Integral que reuniera un amplio
consenso significaría apostar para que Badajoz tenga un desarrollo sostenible y
para que llegue a ser la gran ciudad del sudoeste peninsular que todos
deseamos.
Si fuéramos capaces
de hacerlo en cada una de las grandes ciudades de nuestra región seguro que
consolidaríamos este gran momento que vivimos en Extremadura."
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